A menudo en los hogares no se le da mucho seguimiento al estado de las tuberías, por múltiples razones, entre ellas la agitada vida que se lleva en sociedad en el presente.
Sucede que a veces las fugas son silenciosas y solo se evidencian en el recibo de pago de cada mes.
Por eso es muy importante tener una noción general de cómo funciona el sistema y “chequearlo” cada cierto tiempo.
Las fugas no siempre son grandes, pero cada gota de agua que se pierde no solo afecta en general al ambiente, sino a su bolsillo.
Por tal motivo, MAORSA cuenta con el equipo adecuado y el personal debidamente capacitado para resolver con calidad y prontitud este tipo de problemas en su hogar.
Resulta mucho más económico arreglar una fuga a tiempo que dilatar su reparación.
Nuestra amplia experiencia nos indica que un profesional ahorra tiempo y dinero.